El bolero volverá a sonar distinto el próximo 20 de noviembre, cuando Daniel, Me Estás Matando pise por primera vez el escenario del Auditorio Nacional. El dúo ha logrado algo poco común en la música actual: revivir un género clásico sin perder su esencia, pero vistiéndolo con humor, teatralidad y un toque de descaro melancólico que ya es su sello personal.
Desde que Daniel Zepeda e Iván de la Rioja comenzaron este proyecto, quedó claro que no buscaban rescatar un sonido, sino reimaginarlo. Su propuesta, bautizada como boleroglam, juega con la nostalgia pero no se queda atrapada en ella. Lo suyo es hablar del amor desde sus puntos más frágiles: lo que duele, lo que se rompe, lo que se dice tarde. Y aun así, lo hacen con una chispa que convierte cada tragedia romántica en una historia que se canta entre risas, copas y heridas que ya casi cierran.
Canciones como Si me cruzas por delante, Te hice llorar, Lo hice, te hice llorar o Avioncito de papel han encontrado un lugar especial entre quienes buscan música que abrace sin indulgencias. Cada una funciona como una confesión disfrazada de bolero moderno, donde la vulnerabilidad es protagonista y la ironía aparece solo para hacer el golpe más llevadero.
La presentación en el Auditorio Nacional promete una puesta en escena cargada de dramatismo, guiños cinematográficos y esa intimidad emocional que los caracteriza incluso cuando tocan frente a miles. No será solo un concierto: será una noche para reencontrarse con lo que sentimos, con lo que evitamos decir y con ese amor que, aunque a veces duela, sigue encontrando formas de sobrevivir en canciones como estas.
Daniel, Me Estás Matando llegará con un ritual completo: humor, desvelo y verdad. Una invitación a mirar de frente nuestras propias historias y admitir que, por más que nos duela, siempre terminamos regresando al mismo lugar: donde el bolero nos enseña que amar también es una forma de resistencia.
