W.A.S.P. cumplió recientemente 40 años de trayectoria, podríamos decir qué sería un milagro que bandas así continúen vigentes y dándolo todo sobre los escenarios, la fórmula secreta es de Blackie Lawless que lleva dirigiendo la nave desde 1982 a travesando épocas de total brillantes y temporadas oscuras. W.A.S.P. integra el formidable sequito del shock rock, aunque han jugado en las grandes ligas del heavy metal manteniendo el balance en sus letras, su estilo, sus shows sangrientos, fuego, sierras y toda la parafernalia de un espectáculo musical con puesta en escena que conjuga sin mayor esfuerzo con lo que Life After Death Horror Fest ofrece en calidad de eventos masivos, por eso la banda californiana estará prestándose el día 03 de diciembre teniendo como nueva sede el Parque Cuitláhuac de la Alcaldía Iztapalapa en la Ciudad de México, concluyendo esta edición tan esperada de un festival nuevo para el público mexicano.
W.A.S.P. emerge dentro de la escena que pertenece a sonidos bastante similares como Kiss, Def Leppard o Mötley Crüe. Algo más glam y hard rock. Su propuesta era aún más cruda, salvaje, explicita y densa; incluso junto a Skid Row y Cinderella son considerados pioneros del sleaze rock haciendo de su sonido una rotunda particularidad en álbumes como W.A.S.P. (1984), The Last Command (1985) y The Headless Children (1989), hasta la compleja ópera rock The Crimson Idol (1992) donde el sonido navega por tintes progresivos.
La continuidad del metal progresivo marco desde entonces en W.A.S.P. una línea muy delgada entre todo el mundillo de Blackie Lawless, y lo confirman canciones como: “Euphoria”, “Black Bone Torso”, “Trail of Tears”, “Asylum #9”, “The Last Redemption” por mencionar algunas. Alrededor de 16 álbumes de estudio, W.A.S.P. no solo conquisto ciertos rubros del heavy metal y el progresivo, también desafío sus propios líos desde el nombre y sus siglas We Are Sexual Perverts, traducido: “Somos unos pervertidos sexuales”, hasta la rebeldía de Blackie L. y su compañero Chris Holmes (cofundador de la banda) eran tipos inquietantes para una sociedad un poco retraída y conservadora.
Sus presentaciones a partir del nuevo milenio fueron de poca brillantes sin lentejuelas con los discos Unholy Terror (2001), Dying for the World (2002) y The Neon God 1 y 2 (2004). Pero para Lawless no era todo lo que podría ofrecer después de todo, tampoco era el final de la banda. En 2007 firman con Demolition Records y lanza Dominator y Babylon en 2009. Estos álbumes vuelen a poner a W.A.S.P. en escena, revitalizados en una nueva etapa y nos regalan grandes temas como “Heaven’s Hugh in Black”, “Crazy”, “Babylon Burning”, “Into the Fire” y “Take Me Up”.
En 2015 publican Golgotha si quinta producción discográfica en lo que se refiere álbumes conceptuales. Había pasado un tiempo considerables desde el lanzamiento de Babylon y este nuevo álbum toco las fibras religiosas del cristianismo, mantiene a raya el metal progresivo sin perder esa esencia glam y heavy metal. Tras la grabación de este último disco, el baterista Mike Dupke deja la banda, pero sus golpeteos quedaron registrados los tracks: “Miss You”, “Scream”, “Golgotha”, “Last Runaway” y “Fallen Under”.
Por una vez más W.A.S.P. aterrizara en nuestro país para revivir aquellas épocas de rock prolijo, metal licuado y teatralidad musical; y nada mejor que hacerlo en Life After Death Horror Fest el 03 de diciembre en el Parque Cuitláhuac junto a otras leyendas como Accept, Saxon y Lizzy Borden. No debes dejar pasar esta oportunidad y ver en acción a Blackie Lawless, Doug Blair, Mike Duda y Aquiles Priester. Aun puede adquirir entradas para este show a través de Boletia.com.
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