Una muestra clara y precisa de cómo suena Smashing Pumpkins en 2023. ATUM – Act ll no es un compendio inusitado de las musas que asecharon a Billy Corgan para crear una trilogía recalcitrante, con escases y abundancia su protagonista continua la sucesión narrativa de sus grandes obras Mellon Collie and the Infinite Sadness (1995) y Machina/Machine of God (2000). La tan aclamada trilogía se completará oficialmente el 21 de abril con el tercer volumen (Act lll), el mismo día que la banda lanzará el boxset de ATUM que incluirá los tres actos más 10 temas inéditos.
Pero, para entender en donde se encuentran parados, recientemente, Billy Corgan, concedió una entrevista a Apple Music donde apunta los orígenes de ATUM: “Cuando hice Cyr, fue como, ‘OK, hagamos lo que solíamos hacer’, que es hacer una inmersión profunda y ver qué se nos ocurre. Yo estaba muy concentrado en ese momento en… no apoyarme en aquello por lo que éramos conocidos, sino tratar de encontrar algo nuevo que decir”. “Después de encontrar algo nuevo para ‘Cyr’, pensé en combinar las dos partes de nuestro estilo con nuevas ideas. De ahí viene “Atum”. Es difícil de explicar, pero la banda siempre ha sido buena mezclando el rock de guitarra con nuestras pasiones en ese momento”.
Esta segunda entrega resulta favorable para la banda de Chicago; sintetizadores, guitarras y baterías procesadas, es lo que más resalta tanto a su musicalización. Avalanche abre entre arpegios y sonidos noventeros, quizá el único tema con atmosferas de rock clásico, claro si se permite el término. El track dos es Empires, trae toda la esencia SP con potenciales riffs rockeros y coros ensartados perfectamente. Con este tema abrieron algunos shows en su gira de 2022. Los sintetizadores aparecen en Neophyte, que también integro el setlist en su pasada gira; un ligero coqueteo eléctrico que desmorona el sonido que empezaba a digerirse desde su inicio.
Moss reúne todos los elementos que el álbum necesita, baterías distorsionadas y guitarras pesadas, claro, no es el hardrock por naturaleza, pero a estas alturas el sonido se vuelve preeminente. A partir de Night Waves hay synth pop moderno, conjugado cada tema en su propio mundo; Space Age impulsa el astro melancólico por medio de los sintetizadores, Every Morning suelta una introducción sinfónica que se ve interrumpida por un sonido ochentero, queriéndose mezclar casi obligadamente con el sonido actual en presentación; mientras que To The Grays fluye entre el huracán de las tres canciones anteriores como un puente hacia Beguiled que fue el primer sencillo de toda la trilogía, y qué, a decir verdad, es el tema favorito para muchos. Fue publicado en septiembre de 2022 y para noviembre del mismo año lanzaron Act l donde curiosamente no aparece sino hasta ahora.
Los dos temas que cierran son The Culling y Springtimes. El primero puede tratarse de una balada donde la música está por encima de cualquier estrofa, un sintetizador dirige armoniosamente toda la melodía, junto a una guitarra que pareciera llorar y que en cualquier momento podría reventar. El tema final no reboza gradualmente de detalles, solo una voz que interpreta acompaña una gélida guitarra acústica, hasta concluir con el calor eléctrico de un corto e innegable solo de guitarra que adorna los últimos 10 segundo.
Tras el lanzamiento de ATUM Act 2, The Smashing Pumpkins encabezará el festival The World Is a Vampire de la Ciudad de México el próximo 04 de marzo, y en el mes de mayo en el BottleRock de Napa Valley. Todavía pues adquirir boletos para el festival en México a través de Ticketmaster.