Después de varios años de sencillos que han construido un universo sonoro tan crudo como emocional, Beyond The Matrix lanza “Rotten Looks”, el capítulo más reciente de su serie “Beyond: The Illusion”. La banda retoma su característico sonido metalcore, combinando agresividad con una sensibilidad que no pide permiso para ser escuchada. Desde el primer segundo, la producción está pulida al detalle: guitarras bien ejecutadas, breakdowns precisos y una batería que actúa como metrónomo del caos emocional.
Musicalmente, “Rotten Looks” no intenta reinventar la fórmula, pero la ejecuta con una confianza envidiable. Las voces limpias hacen que la canción se sienta como una descarga directa al pecho. Hay una tensión constante entre lo melódico y lo brutal, un sello que el metalcore ha perfeccionado por años y que aquí se entrega con rabia contenida. Es todo un climax instrumental.
La letra, aunque breve en frases, está cargada de imágenes que remiten a una ruptura emocional que aún supura. Frases como “Time goes on and the distance is killing me” y “I want to find me” sugieren más que una despedida: una búsqueda de identidad en medio del desastre. El personaje de la canción parece atrapado entre el deseo de desaparecer y la necesidad de sanar, como si cada herida fuera también una pista para reconstruirse. Esa contradicción es el corazón del tema.
“Rotten Looks” habla, en el fondo, de desprenderse. No con romanticismo ni con clichés de superación, sino con la sinceridad de quien ha sido arrastrado hasta el fondo y aún no sabe si quiere salir o quedarse ahí un rato más. Beyond The Matrix entrega un tema que encaja perfectamente en la narrativa de su proyecto a largo plazo: canciones como pedazos de un rompecabezas emocional, donde cada entrega es una nueva forma de gritar lo que no se puede decir en voz baja.
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