Fotos por: eberdreamer_ / Eber Martínez.
Con su tercer sencillo, Deckend’s se asoma a su lado más honesto y emocional. “Caigo al Fuego” no es solo una canción más: es el resultado de una etapa difícil, de esas donde todo duele y cuesta trabajo seguir. El tema habla de perder a alguien sin aviso, de esa sensación de caminar con un hueco en el pecho y no encontrar cómo llenarlo. Desde los primeros acordes, se siente que esto viene de un lugar muy real.
La letra no maquilla el dolor. No hay intención de sonar bonito ni de buscar frases para aparentar profundidad. Es más bien como leer el diario de alguien que no supo cómo despedirse y terminó escribiéndolo todo en una canción. La música va acompañando ese peso, con guitarras densas, pausas que calan, y una voz que parece al borde de romperse. Todo está hecho para que quien escucha, lo sienta sin tener que pensar demasiado.
No es una canción hecha para complacer, sino para liberar. Para soltar todo eso que a veces uno guarda porque no sabe cómo decirlo. Lo que logra Deckend’s acá no es fácil: transformar el duelo en algo que no solo se escucha, sino que se entiende con el cuerpo. Es inevitable que remueva recuerdos, que despierte emociones que uno creía controladas.
“Caigo al Fuego” no tiene intención de dar consuelo, pero se convierte en eso sin querer. En un refugio para quienes siguen cargando ausencias. No ofrece soluciones, pero sí compañía. Y a veces, eso es justo lo que se necesita.
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Fotos por: eberdreamer_ /Eber Martínez