Windser debuta con un disco lleno de emociones que suenan a diario vivir

El proyecto de Jordan Topf, mejor conocido como Windser, por fin nos entrega su primer álbum de estudio, y lo hace dejando claro que no llegó para pasar desapercibido. Este trabajo homónimo no solo compila canciones, sino que nos cuenta historias con las que cualquiera puede identificarse: despedidas, recuerdos dulces, momentos difíciles y esa montaña rusa emocional que es crecer y amar.

Desde que comienza el álbum se nota que Windser tiene bien claro qué quiere decir y cómo quiere sonar. Temas como “Abandon” y “Shut Up and Kiss Me” muestran su habilidad para componer. El sonido mezcla guitarras que recuerdan al indie rock de los 2000 con melodías suaves, sin complicaciones, que llegan directo. Es música que no pretende impresionar con adornos, sino hablar de frente.

Una de las piezas más destacadas es “Lose You”, escrita junto a Jackson Phillips (Day Wave), que funciona como el corazón del álbum. Es una canción que retrata ese momento en el que sabes que algo se está terminando. El álbum se envuelve entre ritmos melancólico, con guitarras limpias y una interpretación vocal que no necesita exageraciones para transmitir cualquier emoción.

Este material no solo refleja lo que Windser ha aprendido como compositor, también muestra lo que ha construido en la escena: desde sus colaboraciones con Macklemore hasta su paso por festivales importantes. Con este debut, confirma que su voz tiene peso y que su propuesta puede ir más allá. Si aún no lo has escuchado, este es un buen momento para conocer a un artista que no tiene miedo de contar lo que siente.